Phenomena, The Ultimate Cinematic Experience. ¡Ya te digo!

Acabó mi periplo por el desierto de la asusencia de teléfono e internet con el que han tenido a bien de agraciarme los señores de Movistar, aunque al final, en el tiempo de descuento, por fin llegó el técnico y me activó la linea. Más vale tarde que nunca, oiga. Y vamos a recoger el hilo del blog con la Experiencia Cinemática Definitiva (tal como dice el logo) que yo y otros casi dos mil seres tuvimos el privilegio de disfrutar ayer noche. Las sesiones se engloban en el ciclo denominado Phenomena, una apuesta por recuperar los grandes clásicos del frikismo desde los 70 en pantalla grande y en versión original. La sala, el cine Urgell de Barcelona, una sala inmensa con 1832 butacas y una pantalla inmensa (donde, por cierto, ya asistí al estreno de Spiderman y Matrix Revolutions).

El experimento se inició el mes pasado con la proyección doble de Alien, el octavo pasajero + Tiburón, aderezado con trailers de la época, anuncios y la musiquilla de Movierecord de toda la vida. El éxito fue total, el lleno absoluto, y este éxito se ha trasladado a la sesión de ayer. Y os aseguro, que poder disfrutar en el cine de Indiana Jones y el Templo Maldito (cosa que no hacía desde su estreno, en 1984, con mis 7 añitos) es espectacular y, sinceramente, deja por tierra las películas actuales de aventuras, ya sin mencionar la última entrega del doctor Jones. Y de La Cosa, que es la mejor de Carpenter y que, para ser tan oscura, se veía estupendamente con una pulida copia.

Aquí os dejo el trailer-anuncio que se proyecta al principio de cada sesión y que arranca, por fuerza, los aplausos de los espectadores.